sábado, 9 de febrero de 2008

365 Maneras de salvar la Tierra: Día 87


Desechos: Pinturas sobrantes y pedazos resecos de estas deben ir a la basura.

Pintar la casa es un asunto contaminante. Las latas que contienen restos de pintura, trapos, embalajes, solventes y pegamento echados al basurero se mezclan con el resto de desperdicios domésticos. Ellos tienen un efecto dañino en la descomposición de los gases producidos durante su quema o almacenamiento en los rellenos sanitarios. Si se los bota por el caño, su toxicidad interfiere con el proceso necesario para el tratamiento de aguas. La mitad de toda esta basura no es tratada de la manera adecuada y termina en ríos o en el mar. Tres cuartos de toda la contaminación marina tiene su origen en aguas originalmente potables.

Existen muchas maneras de tratar o disminuir el efecto de pintar tu casa: primero, toma medidas cuidadosas y sólo compra la cantidad que necesites; una vez que hayas finalizado tu proyecto, regala tus sobrantes a alguna entidad comunal o dónala a alguna institución de beneficencia que esté dispuesta a aceptarla. Finalmente, si te deshaces de la pintura, revisa que esté completamente seca (añadiendo viruta de madera o las suciedades de gatos, por ejemplo) antes de echarla al bote de la basura.

Translated from: 365 Ways to Save the Earth by Philippe Bourseiller

FOTO: CC

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